Un docente tiene que tener sueños en su vida para poder conseguir la felicidad a diario y un asesor o asesora tiene que saber susurrar esos sueños para poder hacerlos posibles y compartirlos. Es nuestra máxima preocupación, o la mía, el abordar desde los centros de profesores un asesoramiento eficaz y válido. Se dice que no se puede asesorar al que no quiere; y es verdad. Pero no le hemos dedicado el tiempo suficiente. La gestión burocrática de la formación esta consumiendo la idiosincrasia de esta institución. ¿Alguien puede también susurrarnos a nosotros sueños para compartir?
5 comentarios:
Me parece una excelente entrada. ¿Sabes? Yo tengo muchos sueños y espero que algún día se vean realizados como por ejemplo ver dentro mi libro publicado dentro de ocho años :-)
ya, ya lo sé, que soy una blogacaparadora, pero tengo que decir dos cosas: 1. GRACIAS Mª Jesús!! Si no te importa te voy a invitar como autora para que puedas escribir algún artículo. 2. Que me ha gustado MUCHO esta entrada !!
Mª Jesús, no tengo tu correo, si quieres escribir en el blog mándanos un correo a cepcuenca@gmail.com
Hola Lucía, es un verdadero placer leer tus palabras y todo un honor poder participar en esta bitácora tan interesante :-)
Pues nada, si me animo y tengo algo interesante que contaros sí que me gustaría compartirlo en un artículo.
Te mando mi correo, y muchas gracias por tu amabilidad porque habla muy bien de ti :-)
Un abrazo
Bueno, mejor lo dejo aquí reflejado: mariajesusgonzalezizquierdo@gmail.com
De nuevo... GRACIAS!! :-)
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